El coronavirus nos ha alterado la vida a todos, también la vida parroquial. Y el coronavirus ha llegado para quedarse una larga temporada entre nosotros, nos guste o no nos guste. Por eso no nos queda más remedio que adoptar unas medidas estrictas de seguridad, por tu bien, por el nuestro y por el de todos.
¿Qué medidas hemos adoptado y por qué?
Ya te lo contamos hace unos días cuando te anunciamos que volvíamos a tener misa. Te recordamos las más importantes:
- Uso obligatorio de mascarilla: si no traes mascarilla no podrás acceder al templo. No lo decimos nosotros, lo dicen las autoridades sanitarias.
- Desinfección de pies y manos: A la entrada del templo hay un recipiente con agua y lejía para desinfectar el calzado junto a una alfombra para secarlo después. Antes de entrar tienes que desinfectarte las manos con gel hidroalcohólico. Nosotros te lo ofreceremos pero si utilizas el tuyo nos harías un gran favor.
- Limitacion de aforo: Lo sentimos, pero no podrás sentarte donde quieras, tendrás que hacerlo en los lugares señalados con una pegatina verde y donde te indique el equipo de orden (van identificados con un chaleco reflectante con el escudo de la parroquia). Además solo podrás permanecer en el templo si vienes a participar en la celebración y tienes asiento y una vez que se complete el aforo no se permitirá la entrada a más personas.
Así que, por tu bien, por nuestro bien, por el bien de todos, ven con tiempo y colabora.

Como te decíamos al principio las medidas que hemos tomado no nos las hemos inventado nosotros. No hacemos más que seguir las indicaciones de las autoridades civiles y religiosas. A continuación tienes el documento elaborado por la Conferencia Episcopal Española.
Y si quieres puedes leer la carta que nos escribió nuesto párroco en la que nos explica las medidas adoptadas en nuestra parroquia teniendo en cuenta las directrices generales.
Un anciano sacerdote repetía con frecuencia:
Para ser buen cristiano hay que ser buen ciudadano»
¡Demuéstralo!